Domingo XIII del Tiempo Ordinario, 28 de junio de 2015

2734432110_0a372ab37cLECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 5, 21-43

En aquel tiempo, Jesús atravesó de nuevo a la otra orilla, se le reunió mucha gente a su alrededor, y se quedó junto al lago. Se acercó un jefe de la sinagoga, que se llamaba Jairo, y al verlo se echo a sus pies, rogándole con insistencia:

— Mi niña está en las últimas; ven, pon las manos sobre ella, para que se cure y viva.

Jesús se fue acompañado de mucha gente que lo apretujaba. Había una mujer que padecía flujos de sangre desde hacia doce años. Muchos médicos la habían sometido a toda clase de tratamientos y se había gastado en eso toda su fortuna; pero en vez de mejorar se había puesto peor. Oyó hablar de Jesús y acercándose por detrás, entre la gente, le tocó el manto, pensando que con sólo tocarle el vestido, curaría. Inmediatamente se secó la fuente de sus hemorragias y notó que su cuerpo estaba curado.

Jesús, notando que había salido una fuerza de él, se volvió enseguida en medio de la gente, preguntando:

— ¿Quién me ha tocado el manto?

Los discípulos le contestaron:

–Ves como te apretuja la gente y preguntas: “¿quién me ha tocado?”

Él seguía mirando alrededor, para ver quién había sido. La mujer se acercó asustada y temblorosa, al comprender lo que había pasado, se le echo a los pies y le confesó todo. Él le dijo:

— Hija, tu fe te ha salvado. Vete en paz y con salud.

Todavía estaba hablando, cuando llegaron de casa del jefe de la sinagoga para decirle:

— Tu hija se ha muerto. ¿Para qué molestar más al maestro?

Jesús alcanzó a oír lo que hablaban y le dijo al jefe de la sinagoga:

— No temas; basta que tengas fe.

No permitió que lo acompañara nadie, más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago. Llegaron a casa del jefe de la sinagoga y encontró el alboroto de los que lloraban y se lamentaban. Entró y les dijo:

— ¿Qué estrépito y que lloros son estos? La niña no está muerta, está dormida.

Se reían de él. Pero él los echó fuera a todos, y con el padre y la madre de la niña y sus acompañantes entró donde estaba la niña, la cogió de la mano, y le dijo:

— Talitha qumi (que significa: contigo hablo, niña, levántate).

La niña se puso en pie inmediatamente y echo a andar –tenía doce años–. Y se quedaron viendo visiones. Les insistió en que nadie se enterase; y les dijo que dieran de comer a la niña.

Palabra del Señor

Teatro de la Maestranza, Concierto 16º de Abono

Jueves 25 / Viernes 26
Junio 2015 (16º abono)

70 ANIVERSARIO DEL FINAL DE LA II GUERRA MUNDIAL

Pedro Halffter, Director

Solen Mainguené, Soprano
Alexandra Rivas, Mezzosoprano
Egils Silins, Bajo
José Luis Sola, Tenor

Coro de la A.A. Del Teatro de la Maestranza

A. SHÖNBERG Un superviviente de Varsovia, Op. 46 *
L. V. BEETHOVEN Sinfonía nº 9, en Re menor, Op. 125 “Coral”

Nazareno de la O, Triana

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Domingo XII del Tiempo Ordinario, 21 de junio de 2015

DSC_0200LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 4,35-40

Un día, al atardecer, dijo Jesús a sus discípulos:

–Vamos a la otra orilla.

Dejando a la gente, se lo llevaron en la barca, como estaba; otras barcas lo acompañaban. Se levantó un fuerte huracán, y las olas rompían contra la barca hasta casi llenarla de agua. Él estaba a popa, dormido sobre un almohadón. Lo despertaron, diciendo:

–Maestro, ¿no te importa que nos hundamos?

Se puso en pie, increpó al viento y dijo al lago:

–¡Silencio, cállate!

El viento cesó y vino una gran calma. Él les dijo:

–¿Por qué sois tan cobardes? ¿Aún no tenéis fe?

Se quedaron espantados y se decían unos a otros:

–¿Pero quién es éste? ¡Hasta el viento y las aguas le obedecen!

Palabra del Señor

Teatro de la Maestranza, 15º Concierto de Abono

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Jueves 18 / Viernes 19
Junio 2015 (15º abono)

SIEGFRIED SINFÓNICO

Pedro Halffter, Director

Domingo XI del Tiempo Ordinario, 14 de junio de 2015

semilla2LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 4, 26-34

En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: «El Reino de Dios se parece a lo que sucede cuando un hombre siembra la semilla en la tierra: que pasan las noches y los días, y sin que él sepa cómo, la semilla germina y crece; y la tierra, por sí sola, va produciendo el fruto: primero los tallos, luego las espigas y después los granos en las espigas. Y cuando ya están maduros los granos, el hombre echa mano de la hoz, pues ha llegado el tiempo de la cosecha».

Les dijo también: «¿Con qué compararemos el Reino de Dios? ¿Con qué parábola lo podremos representar? Es como una semilla de mostaza que, cuando se siembra, es la más pequeña de las semillas; pero una vez sembrada, crece y se convierte en el mayor de los arbustos y echa ramas tan grandes, que los pájaros pueden anidar a su sombra».

Y con otras muchas parábolas semejantes les estuvo exponiendo su mensaje, de acuerdo con lo que ellos podían entender. Y no les hablaba sino en parábolas; pero a sus discípulos les explicaba todo en privado.

Palabra del Señor

Teatro de la Maestranza Concierto 14º de abono

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Jueves 11 / Viernes 12
Junio 2015 (14º abono)

REPRESIÓN Y TRIUNFO

Pedro Halffter, Director
Benjamin Grosvenor, Piano

D. SHOSTAKÓVICH Concierto para piano nº 2, en Fa mayor, Op. 102
P. I. CHAIKOVSKI Sinfonía nº 5, en Mi menor, Op. 64

Rosario Vespertino de Ntra, Sra. del Desconsuelo y Visitación

Hermandad de Pasión y Muerte, Triana.

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Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo, 7 de junio de 2015

dsc_01115611LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 14, 12-16.22-26

El primer día de ázimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dijeron a Jesús sus discípulos:

–¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua?

Él envió a dos discípulos diciéndoles:

–Id a la ciudad, encontraréis un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidlo, y en la casa en que entre, decidle al dueño: “El maestro pregunta: ¿Dónde está la habitación en que voy a comer la Pascua con mis discípulos?” Os enseñará una sala grande en el piso de arriba, arreglada con divanes. Preparadnos allí la cena.

Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había dicho y prepararon la cena de Pascua.

Mientras comían, Jesús tomó un pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio, diciendo:

–Tomad, esto es mi cuerpo.

Cogiendo una copa, pronunció la acción de gracias, se la dio y todos bebieron. Y les dijo:

–Esta es mi sangre, sangre de alianza, derramada por todos. Os aseguro que no volveré a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el Reino de Dios.

Después de cantar el salmo, salieron para el Monte de los Olivos.

Palabra del Señor

Hermandad de Pasión y Muerte

Rosario Vespertino con la imagen de Ntra. Sra.del Desconsuelo y Visitación hoy sábado a partir de las 20,00 h. por las calles de la feligresía.

Cartel Desconsuelo 2015